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jueves, 2 de octubre de 2014

EL BAPTISTERIO DE SAN GIOVANNI DE LA CATEDRAL DEL FLORENCIA. EL EDIFICIO, EL ROMÁNICO TOSCANO.

Dante Alighieri (1265-1321), el celebrado autor de la Divina Comedia, admiró en su día la belleza del baptisterio donde fue bautizado y como él el resto de los ciudadanos de Florencia durante siglos.

Dante creía que el edificio era un ejemplo de la arquitectura romana antigua, un templo de la época del emperadorAugusto, consagrado originariamente al dios Marte para conmemorar su victoria sobre la ciudad etrusca de Fiesole. Un siglo después, arquitectos y teóricos del primer renacimiento como Brunelleschi o Alberti, profundos conocedores de la Antigüedad clásica, todavía persistían en el error.

No cabe duda de que en el emplazamiento del baptisterio hubo un edificio religiosos desde fechas muy antiguas. Pero hoy sabemos que el baptisterio en su forma actual se remonta al románico, a fechas entre la segunda mitad del siglo XI y la primera del siglo XII. Está perfectamente datada en 1202 la capilla , denominada scarsella (bolsa de peregrino), un añadido que hace a modo de ábside rectangular. El conjunto externo es una obra paradigmática del románico toscano como lo son la Iglesia de San Miniato al Monte a las afueras de Florencia, la badía de Fiesole o el conjunto de Pisa.

El baptisterio desde el ábside añadido en 1202. Detrás asoma la fachada de la catedral.

Todos estos edificios muestran rasgos comunes inspirados en el mundo romano, que podemos concretar en el baptisterio de San Giovanni.
  • Las plantas de los edificios. El baptisterio en concreto es de planta central octogonal. El octógono está coronado por una gran cúpula de 26 metros de diámetro, oculta exteriormente por un tejado piramidal.
  • La construcción. Bajo la armoniosa decoración de sus muros se esconde una complicada estructura doble inspirada en los edificios de planta central de la arquitectura romana y bizantina, en la que se utilizan ladrillo y materiales ligeros para la cúpula. La luz entra a través de las ventanas del tambor y de un óculo cenital. Hay un piso estrecho de tribuna o matroneo.
La tribuna, decorada con elementos arquitectónicos y mosaicos.

  • La decoración arquitectónica se basa en la del mundo romano: el estilo de los capiteles, el uso de las arquerías de medio punto ciegas, las puertas y ventanas adinteladas, las pilastras acanaladas, los pequeños frontones que rematan algunos de los vanos...
  • El mármol utilizado como material de revestimiento a modo de incrustaciones. En el exterior los muros están cubiertos con planchas de mármol verde y blanco de tan sólo  5 centímetros de profundidad. Las losas forman figuras geométricas acompasadas con las reglas de la proporción y según las leyes de la óptica. En el interior hay más variedad de mármoles. La minuciosidad de la decoración interior y el efecto de riqueza se manifiesta en el suelo taraceado.
Uno de los muros. A la izquierda y frente a la fachada de la catedral, los bronces de la puerta del Paraíso.

  • El elemento decorativo más notable es el mosaico de la cúpula. La realización de esta obra ornamental se comenzó en 1225 y duró cerca de un siglo, participando en ella gran número de artistas, fundamentalmente venecianos y  florentinos como Cimabue o Giotto. La iconografía, estructurada en ocho anillos concéntricos, incluye coros celestiales y diversos episodios de la vida de San José, de Jesucristo y de San Juan Bautista. La secuencia queda interrumpida por la representación de la figura de Cristo Pantocrátor presidiendo el Juicio Final. El estilo no puede ser más bizantino.
Detalle de los mosaicos de la cúpula. Si pinchas sobre la imagen podréis verla ampliada.

Detalle del Infierno. Satanás devorando almas pecadoras.

Junto a estos elementos estilísticos del medioevo, el baptisterio posee tres obras maestras del protorrenacimiento y del  quatrocento: los relieves en bronce de las puertas de acceso.  Estas obras las veremos en otro artículo.

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