La "Red House", en Bexleyheath al sureste de Londres (Inglaterra), fue la primera obra arquitectónica del grupo Arts & Craft. Esta vivienda unifamiliar fue proyectada en 1859 por el arquitecto Philip Webb en colaboración con el poeta y artista William Morris, principal inspirador de este movimiento, y su primer propietario. Interiormente fue decorada con pinturas murales y vitrales de Edward Burne Jones. Morris quería una casa y también un "Palacio de las Artes" en el que él y sus amigos prerrafaelistas pudiesen disfrutar produciendo obras de arte. De hecho fue aquí, durante una cena en 1861, en donde surgió la idea de crear -casi como en una broma-, "Morris, Marshall, Faulkner & Co.", la empresa de diseño de adornos y de muebles en las que trabajaron Morris, Rossetti, Charles Faulkner, Ford Madox Brown, Philip Webb, y Marshall.
La casa fue, por tanto, una especie de manifiesto práctico con la que impulsar la revalorización del trabajo artesanal frente a la deshumanización de la producción industrial. Está construida en ladrillo rojo cálido sin revestimientos, con un techo de tejas, facilitando la adaptación al medio que les rodea. En el interior predominan la madera, los azulejos y el vidrio, materiales naturales que le dan un ambiente acogedor. Los diseños recuerdan un mundo medieval y vegetal.
El mirador sobresaliente del piso superior por fuera y por dentro.
Muebles y vidrieras diseñadas por Morris.
Los autores evitaron seguir cualquier estilo y atendieron sobre todo a la utilidad práctica de la vivienda. El aspecto exterior del edificio surge directamente de la creación de los volúmenes necesarios para cumplir las funciones interiores. Se concibe como una obra abierta capaz de ser modificada si aparecen nuevas necesidades de los usuarios, como sucede en la arquitectura popular en la que se inspira. De hecho en la planta del segundo piso podemos ver el proyecto de ampliación del edificio hacia la izquierda, que no se llegó a realizar.
Red House, 1859. Axonometría y plantas baja y primera.
El jardín también es importante, siendo un ejemplo de jardín integrado como una dependencia más de la casa. Incluso posee un magnífico pozo cubierto por un tejado cónico. La idea era que la casa debía armonizar con el paisaje del entorno. El jardín lo compone un prado de hierba, una huerta, y dos recintos dedicados a las flores (rosa, jazmín, lavanda) y a los árboles frutales (membrillo, manzana, pera y cereza). Colorido y olor la hacen, por tanto, también muy atractiva.
La obra refleja la admiración por la autenticidad y humanidad de los métodos constructivos medievales. Sin embargo, no es la vuelta al pasado, sino la ruptura radical con la arquitectura de se época lo que hace de Arts & Crafts precursora de la arquitectura del siglo XX.
Morris, próximo a los planteamientos socialistas, quiso hacer una arquitectura para el pueblo. Pero la elaboración artesanal y la exigencia de una gran calidad de los detalles hizo que las construcciones de Arts & Crafts resultaran caras e inaccesibles a las clases populares. Paradójicamente, la buena acogida que encontró entre la burguesía facilitó su difusión, especialmente a través de los proyectos urbanísticos inspirados en la ciudad-jardín.
Para ver la arquitectura neogótica inglesa.
jeje interesante no había escuchado de él.
ResponderEliminarhay alguna pagina con el analisis completo de la red house
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